colombiainedita

Monday, January 22, 2007

Enero 16 de 2007 -
¿Por qué Gobierno y Fiscalía no hacen públicas las versiones de los ex miembros de las Autodefensas?
Por tratarse de la confesión de delitos de lesa humanidad, que afectan a la sociedad entera, las audiencias debían ser completamente públicas, según la Corte Constitucional y la Corte Interamericana.
Pero la Fiscalía de Justicia y Paz ha alegado la reserva sumarial. Incluso, el pasado 6 de diciembre expidió una resolución que condicionaba la presencia de las víctimas a que probaran el daño sufrido y a que renunciaran a la protección de su identidad.
Gracias a la presión de organismos como la Comisión Nacional de Reparación, encargada de velar por los derechos de las víctimas, se acondicionaron salas con circuitos cerrados de televisión para presenciar desde allí las versiones libres. El requisito para entrar a las audiencias incluye ahora llenar un formato en el que deben documentar el caso sufrido.
El director de la Fiscalía de Justicia y Paz, Luis González, se ha sostenido en que por ser versiones libres, en las que los sindicados dicen todo tipo de cosas sin que puedan ser verificadas, deben ser restringidas. Afirma que es la imputación la que debe conocer el país entero. Sin embargo, afirma que la Fiscalía está a la espera de que el Gobierno reglamente la participación de los afectados por los 'paras' para liberar cualquier tipo de restricción.
"Es absurdo que digan que hay reserva sumarial cuando de hecho hay varias personas oyendo la versión", afirma Gustavo Gallón, presidente de la Comisión Colombia de Juristas. Esta ONG pidió a la Fiscalía que revoque la resolución del 6 de diciembre y adelanta que acudirá a la tutela si esto no sucede.
También existen ya varios derechos de petición a la Fiscalía para que haga públicas las audiencias. Incluso, para que permita el acceso de los periodistas, pues han tenido que reconstruir los relatos de los ex jefes de las Auc a partir de los testimonios de las víctimas y delegados de ONG.
"Puede pensarse en una transmisión diferida y hasta editada, o en una transmisión radial", afirma uno de los asesores de la Comisión de Reparación.
El caso de Colombia, donde los ex jefes de las Auc confiesan como parte de un proceso de sometimiento a la justicia y no para una comisión de la verdad, como ha ocurrido en otros países del mundo, es muy particular. Sin embargo, bien pueden servir como ejemplo las transmisiones por televisión o radio de los testimonios de victimarios y víctimas, hasta el punto de ponerlos frente a frente, como en el caso de Sudáfrica.
El trabajo fue el producto de comisiones de la verdad, pero el efecto que se buscaba era el mismo: la reconciliación. El hecho es que la falta de garantías para las víctimas en Colombia mantiene en riesgo al país frente al Sistema Interamericano de Justicia, que es mucho más vigilante con el acceso a la justicia que con las mismas sentencias por delitos de lesa humanidad. Y muchas víctimas siguen ausentes de las versiones libres por cosas como la falta de plata para viajar desde lugares apartados.
La experiencia de las transmisiones en otros países
Alexánder Boraine, vicepresidente de la Comisión de la Verdad de SudáfricaMas de 2.000 mil víctimas participaron en las audiencias públicas. Sus historias se veían en la televisión, se escuchaban por la radio y se leían en la prensa. Cuando asistían a las audiencias, las víctimas recibían tratamiento preferencial. El arzobispo Desmond Tutu, presidente de la Comisión, y yo, saludábamos a cada uno, dándole la mano y la bienvenida. Al terminar la sesión de cada día, los miembros del equipo aseguraban que las víctimas pudieran regresar a sus hogares sin correr peligro.
Monseñor Joseph C. Humber, ex presidente de la Comisión de la Verdad en Sierra LeonaPor lo general, los niños y las niñas dieron sus testimonios a puerta cerrada, también lo hicieron algunas mujeres, aunque otras optaron por narrar públicamente sus historias e incluso expresaron su voluntad de tener a los hombres en el panel de audiencias. La Comisión hizo muchas gestiones para facilitar que se escucharan los testimonios de refugiados en diferentes países. Líderes de campamentos de refugiados recibieron entrenamiento para recoger testimonios.
John Baptist Kawanga, de la Comisión de Investigación sobre violaciones de Derechos Humanos de UgandaLa Comisión fue una auténtica Comisión Judicial de Investigación; estuvo presidida por un juez de la Corte Suprema. Allí, públicamente, se escucharon miles de testimonios e incluso fueron televisadas la mayoría de las evidencias dadas por los testigos de alto perfil. Las audiencias donde ellos y las víctimas se presentaron recibieron un amplio cubrimiento por parte de los medios de comunicación. En realidad el pueblo de Uganda se fascinó al ver a ciertas personas, alguna vez poderosas, explicando sus actividades. Por primera vez en la historia del país, los temidos y los omnipotentes tenían que rendir cuentas. Desde ese punto de vista, al menos, la Comisión logró algo importante. Por lo menos se supo la verdad sobre lo ocurrido.
Mark freeman, director del centro internacional para la Justicia transicional en BruselasSobre lo que ocurrió en Nigeria con las audiencias Sus audiencias públicas captaron el interés de los televidentes y los radioescuchas del país, lo que creó una nueva conciencia en torno al sufrimiento de las víctimas. Sin embargo, fue limitado el valor de esas audiencias en cuanto a la reparación, ya que en lugar de focalizar su atención en los problemas de las víctimas, se centraron en la confrontación entre adversarios.


Tomado www.eltiempo.com

0 Comments:

Post a Comment

<< Home