Fiscal de Valledupar que investigaba violaciones a derechos y narcotráfico era ficha de 'Jorge 40'

Mayo 9 de 2007

Fiscal de Valledupar que investigaba violaciones a derechos y narcotráfico era ficha de 'Jorge 40'


Varias de las investigaciones que tuvo a su cargo del fiscal detenido estaban relacionadas con los crímenes de los 'paras' de 'Jorge 40'. Las primeras acusaciones de nexos con los paramilitares contra Francisco Becerra Araque, fiscal tercero especializado de Valledupar, fueron hechas por un hombre, hoy protegido por las autoridades.

Según el testigo, llegado de la Costa Atlántica, Becerra era ficha del bloque Contrainsurgencia Wayuu de las Autodefensas, uno de los grupos de 'Jorge 40', y utilizaba su puesto en la Fiscalía para favorecer a los 'paras'.

Por sus manos pasaron los casos del asesinato del ex congresista de Magdalena Fernando Pisciotti, ocurrido en el municipio de El Banco a finales del 2003, y varios de los cometidos por las autodefensas en su arremetida en Barranquilla.

Aseguró además que su contacto era directo con 'Ramiro', segundo de '40' en la parte norte del Cesar y La Guajira, el hombre que manejaba las rutas por donde sale la coca de la Sierra Nevada de Santa Marta hacia el Caribe.

El informante acusó al fiscal de presionar testigos

Cuando un campesino de la zona llegó a la Fiscalía en Valledupar para entregar información sobre ese 'para', dijo el informante, el fiscal "empezó a presionarlo y a cambiarle la versión. Lo intimidó para que no lo hiciera, porque eso era muy peligroso y era mejor dejar así las cosas".

Ese testimonio fue el origen de una investigación interna que llevó a la Fiscalía a ordenar la captura de Becerra, que el pasado lunes se entregó en las oficinas del DAS en Bucaramanga.

Interceptaciones telefónicas, correos electrónicos y otras pruebas llevaron a los investigadores a calificar al fiscal de Valledupar como "colaborador de los paramilitares" de Jorge 40. Está sindicado de cohecho y la Fiscalía revisa con lupa las decisiones que tomó en los últimos años en procesos en los que la justicia todavía sigue sin aparecer.

Casos de homicidios y desapariciones de líderes políticos e indígenas -muchos de ellos kankuamos de la Sierra Nevada-, comerciantes y campesinos de la región en la que 'Ramiro' tenía directa influencia figuran en esa lista.

También se investiga una posible fuga de información sobre allanamientos, registros y otras diligencias contra '40', 'Ramiro' y otros paramilitares del bloque Norte entre los que se menciona a Édgar Ignacio Fierro, 'don Antonio', el hombre de confianza de 'Jorge 40'.

La Fiscalía también indaga si el funcionario habría participado en la venta de algunos expedientes que habrían llegado a las manos de las autodefensas.

"Hay evidencias de que el fiscal habría favorecido en investigaciones por homicidios a 'Ramiro', comandante 'para'", explicó un investigador de la Fiscalía General de la Nación.

Poder corruptor de la 'Oficina'

La salida en limpio de la cárcel de paramilitares como el hoy desaparecido Daniel Mejía, 'Danielito', volvió a despertar las preguntas sobre por qué nunca se pudo comprobar nada contra personas que, como él, aparecían mencionadas en decenas de crímenes en Envigado y otros municipios de Antioquia.

Según fiscales consultados por EL TIEMPO, en ese departamento habrían operado fichas encargadas de precluir o archivar investigaciones contra los 'paras'.

Esa llave macabra se comenzó a destapar tras el homicidio del fiscal Ignacio Aristizábal, en octubre del 2005.

Por ese crimen viajó desde Bogotá una comisión para revisar procesos relacionados con la 'Oficina de Envigado'.

Según las fuentes, un alto miembro de la Fiscalía incluso llamó corruptos a varios fiscales en un evento interno en la capital antioqueña.


La fiscal que ayudaba a 'paras'

Hasta el 2003, Ana María Flórez Silva era una de las funcionarias más destacadas de la Fiscalía. Allí la conocían por la amistad de su padre, Álvaro Flórez Bernal, con Luis Camilo Osorio, el Fiscal de ese entonces.

Pero ese año, la jefa de fiscalías de Cúcuta cayó en desgracia.
Fue acusada ante la justicia por su ex asistente Magally Moreno de colaborar con 'paras', entregándoles información privilegiada y señalando a personas para que fueran asesinadas. Esto fue corroborado por Salvatore Mancuso durante el inicio de su versión libre, en enero pasado, ante Justicia y Paz.

También se le acusa del asesinato de su esposo, el abogado Alfredo Flórez Ramírez, y de las desapariciones de Carlos Alberto Pinzón, un funcionario del CTI de Cúcuta, y su novia, Carolina Osma Claro.

A finales de marzo pasado, la Corte Suprema la condenó a 12 años de cárcel por suministrar información oficial a grupos paramilitares. La ex funcionaria está prófuga.

Publicado en www.eltiempo.com